De Autor~

Carta a la que una vez fue mi amada

Me encontraba en medio de una laguna mental de la cual no lograba salir, me sentia perdido en un mar de posibilidades. Cada una con otro oceano de posibles aconcontecimiemtos.

No sabia que hacer o que decir, me sentia inutil, desganado. Eso fue lo que probocaste en mi, un torbellino de sentimientos que dajaban mi cabeza hecha un lio, un rompecanezas con mas de mil piezas y sin coherencia alguna.

Sin embargo eso no fue lo que me dolio. Lo fue tu partida. Con esa pobre despedida carente de todo sentimiento dulce o consolador, un simple y bulgar "adios" sin nada, vacio...

Eso fue todo lo que recibi de ti. Un simple adios sin explicacion, sin motivo alguno, sin darme tiempo a reacionar te fuiste. Me dejaste plantado cual estatua olvidada en alquel claro al que tanto frecuentabamos por las noches de luna. 

Lo mas triste es que a la noche siguiente esta tampoco estaba. Como si como si al momento de tu ida, esta te ubiese seguido, dejandome solo...

Completamemte solo en la obscura noche ahora sin luna, las estrellas y luceros tintineaban con un ritmo lento, lastimero. Coml si desde su lugar me observaran con dulzura lastimera. Casi pude sentir como si en la complejidad de mis pensamientos estas me compadecieran. La noche truanscurrio tranquila y nostalgica, yo sin embargo no lograba Consiliar el sueño,tu recuerdo me invadia como un relampago y en cueston de segundos me destroza el alma.

El jueves de la ultima sema del mes de noviembre tu recuerdo me atrapo por varios dias nuevamente. Pero sin esa intencidad de años anteriores. En los cuales no consiliaba el sueño pensando en tu recuerdo, en las noches que compartimos bajo la luz de la luna, en aquellas cenas que compartimos juntos en Marid, y en los versos recitados en los teatros a los que soliamos frecuentar.

Ya puedo seguir mi vida sin la interrupcion de tu rostro... sin embargo tu insistes en volver. Ayer llegaste a mi departamento con un rostro lleno de arrepentimiento y con una fragil esperaza en tus ojos 

-podemos intentar de nuevo. Te lo explixcare todo... te lo juro. Tan solo dame otra oportunidad... por favor...

Sin embargo ya era demaciado tarde para volver a intentar algo.  Y con las mismas palabras dichas hace ya tantos años te respondi

"Adios..."